Creado en 1998, el Magíster en Gestión y Planificación Ambiental (MGPA) surge como respuesta a una necesidad del país para enfrentar los desafíos y compromisos medioambientales planteados en la Cumbre Ambiental de Río de Janeiro en 1992.
“Este programa ha contribuido a formar especialistas desde un enfoque interdisciplinario para la resolución de problemas ambientales complejos. El principal objetivo ha sido formar graduados y graduadas de excelencia, capaces de realizar investigaciones científicas, aplicadas y también habilitados para trabajar creativamente en la propuesta a problemas complejos. Estos problemas conciernen la gestión y planificación ambiental, el desarrollo sostenible, la justicia ambiental y todo lo que involucra avanzar en el camino de la sostenibilidad “, señaló la Coordinadora del Programa, Dra. Claudia Cerda.
La inter y transdisciplinariedad son parte estructural de este programa cuyo comité académico está compuesto por ingenieros agrónomos, ingenieros forestales, ingenieros en recursos naturales renovables, abogados, especialistas en el área social, geógrafos, entre otros. Todos ellos enfocados en el área del medio ambiente, planificación y recursos naturales.
En la Ceremonia de Celebración por los 20 años, celebrada el día 21 de noviembre de 2018, la Decana de la Facultad de Ciencias Forestales y Conservación de la Naturaleza, Dra. Carmen Luz de la Maza, relató que “el programa fue una respuesta a una necesidad del país que venía por décadas enfrentando desafíos y problemas medioambientales que no estaban resueltos en muchas décadas anteriores; problemas que afectaban no sólo a Chile sino a muchos países del mundo”.
Desde la creación del MGPA a la fecha, han participado entre 10 a 25 estudiantes todos los años, con una gran diversidad nacionalidades. Estudiantes provenientes de Chile y también de países latinoamericanos, como Argentina, Bolivia, Colombia, Ecuador, Panamá, Perú, y otros. Además de países más alejados como los Estados Unidos y Canadá. Con este último país el Programa tiene un convenio con la Universidad de Sherbrook, para el intercambio de estudiantes durante un semestre.
En los 20 años, han egresado cerca de 300 estudiantes de diversos orígenes profesionales, tales como periodistas, ingenieros civiles, médicos veterinarios, ingenieros forestales, agrónomos, entre otros.
“En estos 20 años hemos sido testigos de avances en materias medioambientales del país, las que se ha reflejado -en grosso modo- en las modificaciones al reglamento del sistema de evaluación de impacto ambiental en 2001; luego en el 2010 se modificó la ley que dio origen al Ministerio de Medio Ambiente, la superintendencia ambiental, tribunales ambientales y muchas otras modificaciones que se dieron en este periodo. Este programa siempre ha estado vigente en esas materias y ha venido a dar respuesta a muchas de las necesidades medioambientales del país”, agregó la Decana de la Maza.
La prevención y resolución de los conflictos ambientales implica el conocimiento holístico e integrado de los aspectos naturales, socio-económicos y territoriales asociados al enfoque de ecosistemas, que caracterizan el estudio moderno de las Ciencias Medioambientales y su aplicación a la planificación y gestión.
El Pensamiento crítico para superar los problemas medioambientales
La celebración del aniversario del Magíster, tuvo como invitada a una de las más reconocidas expertas en temas de desarrollo y medio ambiente en América Latina, la Doctora María Luisa Eschenhagen, Doctora en Estudios Latinoamericanos de la Universidad Nacional Autónoma de México. Es también Magíster en Análisis de Problemas Políticos, Económicos e Internacionales de la Universidad Externado de Colombia.
Su trabajo de investigación ha girado en torno a la educación ambiental superior; historia crítica del desarrollo; pensamiento ambiental; alternativas al desarrollo y ciencias sociales y ambientales. En su charla magistral la Dra. Eschenhagen, destacó que el programa MGPA fue pionero en América Latina con énfasis ambiental y desde una mirada interdisciplinaria.
En su presentación la Dra. Eschenhagen, hizo una revisión crítica del estado del arte de los avances medioambientales a nivel mundial tras los acuerdos de Río de 1992. Al respecto, la experta sostuvo que en la actualidad hay un mayor enfoque empresarial con un claro énfasis en la perspectiva legal, “un enfoque economicista, instrumental y mecanicista de los asuntos medioambientales que se reproduce en general en las universidades".
Desde su perspectiva e investigaciones realizadas, “no hay mejoras en la huella ecológica, lo que se ha hecho en estos 20 o 30 años no tiene un impacto positivo, más bien han aumentado los conflictos ambientales. No hay mejoras significativas frente a la destrucción sistemática del planeta”. enfatizó.
En relación a los programas de posgrado que se dictan en América Latina, la gran mayoría son de gestión ambiental y desarrollo sustentable, pero “no hay mayor contexto, no se abordan las causas de los problemas ambientales, ahí se ubica el límite de la retórica verde”.
En este marco, la fragmentación del pensamiento ha sido uno de los grandes impedimentos de la comprensión profunda del problema medioambiental. "Lamentablemente las universidades han sido absortas por la presión de los sistemas de ranking que no permiten una mirada más integral y reproducen un pensamiento fragmentado, sin ser capaz de generar un pensamiento crítico, limitándose generalmente a lo descriptivo de los fenómenos”.
En este escenario, María Luisa Eschenhagen recalcó la necesidad de articulación de las ciencias “el reto de superar la multidisciplinariedad para aplicar la interdisciplinariedad, de construir un nuevo conocimiento desde propias epistemes modernas.Necesitamos revisar nuestras bases epistemológicas para posibilitar alternativas reales”.
Por su parte el Profesor Hugo Romero, Dr. en Geografía y Ordenación del territorio, Universidad de Zaragoza, España. M.Sc. Ingeniería Agrícola, Mención en Ordenamiento Territorial, Universidad de Cranfield, Inglaterra, fundador e integrante del Comité Académico del MGPA, relató la trayectoria individual y colectiva que permitió la implementación de la maestría.